Lección 3 – Técnica de pies

Técnicas de pie

Habitualmente decimos que un escalador tiene una buena técnica de pies cuando domina el repertorio de las diferentes técnicas, que a continuación se describen, pero sobre todo las hace útiles en su función.

Es decir que realmente son funcionales en el objetivo último de cada situación, que es cargar el máximo de peso posible sobre los pies tanto en posiciones estáticas cómo en movimientos ya sean rápidos o lentos.

Es importante educar a los que se inician e insistir sobre el concepto del peso sobre los pies aunque la situación sea muy favorable para desarrollar fuerza con los brazos; un ejemplo podría ser el inicio de un entrenamiento en que todavía no aparecen síntomas de fatiga o una situación en que las presas de manso son muy grandes e invitan a una utilización desmesurada.

Apoyo interior
Consiste al usar la parte interna de la planta del pie, siendo la zona más habitual el dedo gordo del pie. En esta posición es en la que podremos desarrollar más fuerza de elevación, puesto que el dedo gordo es mucho más potente que no los más pequeños que encontramos a la cara externa. Esta técnica se ve favorecida por una buena amplitud de movimiento en la articulación coxo-femoral.

 

Apoyo exterior

Consiste en usar la parte externa de la planta del pie. La zona de contacto del pie es mayor respeto el apoyo interior, podemos apoyar desde los dedos pequeños, todo el arco plantar e incluso el talón. También el apoyo exterior es la base para después hacer otras técnicas como por ejemplo la escalada en cuerpo girado.

Talón del pie

Consiste en la utilización del talón, tanto por la cara interna como externa pero siempre que se trate de una tracción, y no de un apoyo. Habitualmente cualquier parte del talón no plantar (calcáneo caudal).
3 posiciones a saber:

1. Reponer.- Descarga de parte del peso, se podría entender como un tercer brazo.
2. Equilibrar.- Otro uso consiste en la utilización del talón para evitar una situación de desequilibrio o puerta.
3. Empujar.- Talón para desplazar el c.d.g a un punto determinado y poder llegar así a presas más lejanas. El claro ejemplo de tracción vertical sería la técnica de cuerpo del “mantel”.

Empeine del pie


Consiste en la utilización de la parte dorsal del pie como elemento de tracción. En cuanto a acciones, hablamos de los mismos casos que el talón.
La suspensión de todo el cuerpo con la ayuda de ambos pies por sus respectivas partes dorsales; en el mundo de escalada, recibe el nombre de vampiro. Es ciertamente espectacular y divertido pero conlleva un riesgo inherente fácilmente comprensible. Es muy poco frecuente en roca natural, ya que en la mayoría de los casos, existen técnicas más económicas; pero si se utiliza en exhibiciones y competiciones da espectacularidad.

Planta del pie – Adherencia
Consiste en la utilización de la suela del pie de gato por la planta del pie, aprovechando la fricción que nos puede ofrecer la goma contra una superficie plana. Es importante mantener el c.d.g sobre la superficie de apoyo.
La presión de los pies contra la roca se puede incrementar en caso de separar el cuerpo de la pared; esto sólo será posible si existen presas para las manos. Cuando el talón baja por debajo de la altura de la punta también incrementa esta fricción.
Para tener buena adherencia es necesario que la suela de los pies de gato esté muy limpia. Esta técnica se manifiesta sobre todo en muros declinados (no llegan a la vertical, en el argot se conocen como “slabs”).

Grapa
Para efectuar esta técnica es necesaria la combinación de otras anteriormente descritas: una tiene que ser la utilización del empeine del pie y el otro puede ser apoyo interior o exterior. Esta técnica se utiliza sobre todo en muros muy desplomados y todavía más a los techos puesto que nos permite descargar mucha tensión de los brazos.

Cambio de pies


Se utiliza cuando existen pocas posibilidades de apoyo, es fácilmente practicable en travesías (desplazamientos laterales) para los dos lados. Podemos hacer un cambio de pies de tres maneras diferentes:

• Sobre la misma presa haciendo un pequeño salto
• Pisando
• Haciendo un espacio progresivamente moviendo los pies de un lado hacia el otro pivotando sobre la zona de apoyo.

Según la situación aplicaremos una o el otro y será positivo practicar todas las opciones y reflexionar sobre los beneficios de cada una y de nuestra habilidad para practicarlas.

Empotramientos del pie
Esta técnica consiste al introducir el pie, normalmente en una fisura, y mediante la torsión y el apoyo en la parte plantar y dorsal del metatarso se consigue falcar el peso y nos permite progresar.

Empotramientos de la rodilla


Otro tipo de empotramiento seria el que conocemos como empotramiento de rodilla. Lo encontraríamos en dos situaciones:

• En la escalada en chorreras o muros desplomados.- Consiste en el empotramiento de la tibia y el peroné entre una presa de pie y otra de rodilla.
Normalmente se hace un apoyo de la parte interior de la rodilla y la descarga de peso mediante la contracción de los gemelos.
• En las fisuras, empotrando la rodilla tal y como describíamos para el pie en el punto anterior.

Completando Mi blog de ESCALADA Para OCR

Trabajo práctico:

  1. Cuál de las posiciones de los pies crees que es la más habitual en OCR y por qué? Vas a crear una entrada en tu Blog con este tema.
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